Pescado graso
Hay varios tipos de pescados grasos que pueden incluirse en esta categoría. Antes de que te desanimes porque hemos dicho “graso”, debes entender que aportan el tipo de grasa bueno. Prueba a comer pescados como el arenque, la sardina, la trucha, la caballa y el salmón. Todos ellos te proporcionan una gran fuente de ácidos grasos omega-3.
Tomates
¿Te has fijado alguna vez en que los tomates parecen corazones? No es casualidad, digo yo, la naturaleza intentaba decirnos algo. Supongo que el mensaje de la naturaleza era que los tomates son realmente buenos para la salud cardiovascular. Los tomates están llenos de vitamina C y vitamina A, fibra, licopeno y potasio.